domingo, 12 de enero de 2014

Mi niño, mi amor.

Y sólo porque se que lee este blog ultimamente y es mi más reciente y único fan, escribo especialmente este post a mi Manuel.

Me encantaría poner por escrito un aspecto que considero primordial en nuestra relación. Es muy común en los noviazgos compartir el tiempo, compartir la comida, sueños y aspiraciones, e incluso, la cama. Pero lo que me trae aquí es poder platicar lo mucho que me apoya Manuel con mis problemas. Me ha sido muy difícil, desde siempre, compartir mis problemas más personales, aquellos que me mantienen despierta en la noche. Aquellos problemas que ocasionan problemas.

No es el hecho de que simplemente haya tenido la confianza de compartirle tanto, sino el hecho de que se preocupa por encontrar la forma de que pueda yo resolverlos. Creo que no he tenido la oportunidad de decir ni agradecer lo mucho que eso  significa para mi. Nadie se había preocupado así por mi, ni siquiera mis mejores amigos, ni si quiera mis propios padres.

No estoy segura cuál es la mejor forma de resolver mi problema, pero me encanta el hecho de poder descubrirlo al lado de la persona que amo.

Espero que no se enoje por estar publicando cosas tan personales, pero quiero que sepa que lo amo y que es mi más grande apoyo.





Te amo mi Manuel.

sábado, 11 de enero de 2014

Donde estamos es a donde queríamos llegar.

Si bien me han dicho, creo que es tiempo de escribir algo más importante que las tristezas que han rodeado mi vida. Un momento más importante, aquel que te mueve a salir de un lugar en el que sabes que estás atrapado.

Así fue. Mi llegada a un país extraño, con costumbres y tradiciones distintas. Sabiendo y habiendo vivido esta historia anteriormente cuando me mudé para estudiar la universidad, me encontré en un proceso terrible de adaptación. Sinceramente, la primera vez que lo sentí en Monterrey, fue un cambio totalmente nuevo para mí; me pregunta mi padre si volteo atrás hubiera deseado no haber pasado por eso y me respuesta fue un rotundo no. Sin embargo, el estar consciente de el problema que de afecta y no poder hacer nada al respecto es, en efecto, muy inquietante.

Bien, hoy, recordé las palabras que un amigo me dijo ya hace un año, mas o menos. Estabamos en una fiesta, lo recuerdo muy bien, su fiesta de cumpleaños, estaba presentandome a un amigo suyo y de pronto, su amigo me preguntó que qué estudiaba. Mi respuesta siempre ha sido una respuesta orgullosa, Administración de Empresas. Claro que no tardo un sólo segundo para burlarse de mi elección de carrera universitaria y mi amigo volteó y dijo "Cristabel no es cualquier LAE, no es cualquiera de esas que son hijos de papi y tienen todo listo en la vida. Cristabel todo lo que tiene lo ha logrado por ella misma." Creo que nunca voy a poder olvidar ese momento, porque para nada me esperaba un comentario así.

Y en este momento, puedo decir que mi trabajo me ha costado lograr lo que he logrado hasta hoy. Puedo decir que he vivido muchos de los momentos más difíciles de los que habría podido imaginar. Sin embargo, estoy orgullosa de todos mis logros y si algo me tiene aquí, lejos de la persona que más amo y de mi familia, es el comienzo de algo grande.

Mis sueños y mis aspiraciones me van a llevar más lejos de lo que puedo imaginar, de eso no tengo duda. Nací y trabajo para ser grande.




martes, 29 de octubre de 2013

Qué manera de caminar por los días sin un gesto en particular.


Así es la vida cuando te toca y no te deja ni un momento. Y así fue que otra de mis desdichas me avientan a la literatura imperfecta, logrando que dictamine oficialmente mi tristeza. Parece irreal el seguir viviendo la vida que cotidianamente acostumbras sin un factor que se consideraba fijo ya por unos cuantos años. Cosa que al momento parece el infierno y que, muy probablemente en 5 o 10 años, considere un suceso desafortunado y misericordioso. Ya que si de miseria hablamos, pues ahí me encuentro yo. Desafiando mis pensamientos entre sí en alguna parte de mí se encuentra el corazón que alguna vez sentía. Sí, soy lo peor. Y que de eso no quede duda, mi más sentido arrepentimiento de la persona que dejé de ser por un tiempo. 

Y es que cómo explicar que dejamos de ser dos para ser uno, cuando jamás quise dejar de ser yo. Imposible llegar a pensar que podría cambiar tanto sin darme cuenta y al mismo tener intenciones de no cambiar nada. Mi tristeza es un sentimiento que no puedo llegar a negar por más que lo intente; sin embargo, la paz que siento en mi alma por liberar todos esos sentimientos que me atormentaban, es algo inigualable. Siéntete feliz, porque ya soy quien debo ser. No niego mi culpa, ni la pretendo disminuir. Acepto los golpes del mundo como debo de hacerlo. Si te hace un poco más feliz saber lo mal que la estoy pasando, acepta esa dicha. 

Así es y no lo discuto. No hagas preguntas de las cuales no quieres saber la respuesta. 

jueves, 15 de noviembre de 2012

Si bien la luz nos llega a todos en algún momento, creo que hay veces en las que necesitamos luces que nos guíen a través de nuestra vida. Es inconcluso pensar que estamos en este mundo solo por ser y solo por estar, es necesaria una estrella en el firmamento para hacernos pensar y crecer juntos por los sueños que tanto merecemos resolver.

Y bien, ni por donde comenzar, si no por una disculpa y una súplica de perdón desde el fondo de mi corazón. Y no sólo a ella por su reciente partida, si no a todas las personas que he tocado con tan solo una mirada. No ha sido lo suficientemente impactante para reconocer la verdad, la falta de valores existentes en nuestras vidas. Es cuestión de entender y ser humano, porque la vida es así. Sin embargo, en momentos en los que los ojos los tenemos vendados y no logramos ver la realidad, podemos caer. Sinceramente espero que haya donde estés, seas feliz y sepas que de corazón me arrepiento de todo lo que dije y todo lo que hice. Y yo se que probablemente lo sepas, sin embargo, mi corazón no está tranquilo si no lo pongo por escrito.

Porque así somos las personas, los humanos. Creemos que el castigo es la mejor solución para expiar las penas y vaya.. que ya he aprendido de eso. No es por volver a viejos andares, pero la escritura poco a poco desahoga el alma y el espíritu.

Me preocupo por ver quién soy. Porque eso hacen este tipo de cosas, te abren los ojos... te quitan la niebla que se interpone entre la realidad y lo que gustas ver. Me preocupo por los que ahora son mis amigos, y por los que ya no. Quisiera ocuparme en decirles lo mucho que lo siento y, que aunque se que lo que se rompió no volverá a estar unido, estemos en paz. Puede que de la casualidad que la única que no está en paz con su culpa sea yo... pero en cualquiera de los casos creo que es justo externar mi sentir. Ojalá fuera posible.

Lo siento. Por ella, por su familia y por sus amigos... incluso por los que algún día, también, fueron los míos  Quisiera decirles que en mi corazón está un perdón esperando salir y si quiera llegar desde hace mucho tiempo. Se que no es tiempo, y probablemente nunca lo será, pero a pesar de todo, siento su pena.

Esto es por ella, por ustedes y por mí. Porque el día en que decidan regresar, dejaré mi orgullo atrás y aquí estaré. Como siempre.

Con amor.






Anna


En tu recuerdo, Paola.

lunes, 5 de noviembre de 2012

Creo que lo único que puedo decir hoy, es que somos ciegos.

Y no porque este mal, ni necesitemos lentes para ver la realidad. Es cuestión de entender que la realidad no es lo que nos hace felices, si no el simple hecho de sentir y ser la realidad que nosotros queremos ser. ¿Cuántas veces hemos intentado ser algo que no somos, ver cosas que no son y sentir cosas que pensamos sentir? Somos humanos y la realidad que tenemos no es la misma que percibimos.

Mi mundo en sí, no es lo que ustedes piensan. Ni lo que yo pienso. Sin embargo, y la mayoría de las veces me hace feliz. Se cómo soy y tal vez como debería de ser, pero, como siempre he dicho, entre lo que debo hacer y lo que hago, puede existir una gran diferencia.

Me gusta como soy y no quiero, ni creo poder cambiar. No siempre hago feliz a todos los que me rodean, pero crean, dentro de lo más sincero de mi ser que me preocupo por ustedes. Que me hacen feliz con cada día que pasa, y que no cambiaría mis amistades por nada del mundo.

Claro que muchos, son los primeros que pienso cuando quiero hacer algo y se que soy su último recurso para que ustedes hagan algo. Me parece justo, al fin y al cabo, no suelo tener una paciencia tan grande.

Lo siento, quisiera decirles que mi corazón es enorme y mi paciencia mejor aún. Pero no soporto la traición y menos estar en segundo lugar. Sé que conmigo no vas a ganar. Aclarando que esto no va para nadie en especial y que sólo dejo mis dedos escribir una mis prosas mas incoherentes, siento que soy lo que soy gracias a mí, y también a ustedes. Lo malo y lo bueno.


miércoles, 29 de agosto de 2012

Porque viviendo se aprende a vivir.

Y bueno, después de tanto tiempo sin escribir, por fin me animé a entrar y hacer un poco de literatura. En estos tiempos donde los estudios absorben el 90% de tu tiempo y el otro 10% lo sometes a una rifa entre descansar o hacer algo de diversión... bueno, estamos en ese 10%. Y de que escribiré en este momento, algún problema, alguna solución... 

Siempre he descrito y escrito en este blog lo que ha sido parte de mi vida. Probablemente se encuentren aquí más capítulos de mi vida de los que yo en este momento puedo recordar. Existen más páginas tristes en esta nube de poesía que momentos agradables que se hayan podido colar por las teclas de mi humilde máquina.

Empecemos pues con lo que les quiero platicar el día de hoy. Una filosofía de vida que me ha acompañado desde hace ya tiempo y que, hasta ahora, no me ha dejado atrás. Se trata de simplemente vivir con un pensamiento de "si me voy a dormir, mañana me podría haber arrepentido de..." no haber hecho tal cosa, haber dicho tal, etc. ¿Por qué pienso que esto es tan importante? Porque aunque no soy partidista del "vive hoy como si no hubiera un mañana" reconozco que debe de existir ese sentimiento de recuerda que estas viviendo HOY. Y que si no existiera el HOY no podrías haberlo hecho. Sin duda, no soy filósofa ni experta en las palabras y en las ideas; sin embargo, en unas cuantas lineas de aliento, puede que alguien encuentre un consejo dentro de unas simples palabras. 

Es común pensar en la vida cotidiana, la rutina y el cansancio. Es normal pensar que no existe un motivo interesante por el cual estar exaltado o estar viviendo de una manera inesperada; en cambio, pienso que es imperativo pensar que el que se vive no es "pasado, presente, ni futuro" es AHORA. HOY, instante... distintas palabras que se puedan encontrar. Porque hablar de tiempos verbales en el idioma es una forma muy abstracta de pensar, y al pensar de esta manera se vuelve poco tangible la realización de algo. Porque una idea no deja de ser idea hasta que se vuelve en "algo". 

No que sea yo un ejemplo a seguir, ni que practique a la perfección mis propias filosofías de vida, pero porque no recordarnos mutuamente lo importante que es estar despierto dentro de nuestras propias vidas.




Anna

viernes, 29 de junio de 2012

Sé quien soy y lo que quiero.

Creo que en el diario vivir me gusta que las personas sepan quien soy y tratar de dar a relucir mis mejores talentos. ¿Por qué? No sé, tal vez sea la naturaleza humana. Me gusta que me conozcan por completo, con mis fallas y con mis mejores actitudes, ciertamente porque no me gusta que la gente se crea faltas expectativas. ¿El propósito de este escrito? Propiamente ninguno, sólo divertirme.

Soy una persona apasionada por lo que hace en la vida, pero sobre todo en lo que se refiere a querer a los demás. Me gusta amar a alguien y sentirme amada de la misma manera, así como también me gusta sentirme querida por mis amigos a los que les correspondo con un cariño similar. Puede ser que el amor que les tengo a las personas sea mayor que al que me tengo a mi misma y sé que pueda ser eso lo que me ha causado algunos problemas, pero voy avanzando poco a poco en eso.

Canto, bailo, camino, sonrío y soy de la mejor manera posible, simplemente por el hecho de gozarlo. Tengo talentos escondidos que no he llevado más allá de una experiencia sola en la vida. Siento que no tengo un talento en especial, si no un conjunto de ellos que ninguno destaca dentro de la multitud, sin embargo, estoy muy agradecida por tenerlos.

Cada vez que vivo una experiencia nueva, me doy cuenta de la gran persona que soy, y no es por presumir o hacer más grande mi ego, si no para entender que no todas las personas merecen estar en mi vida aunque yo lo piense así.

He hecho cosas que me han causado mucho arrepentimiento en mi vida y no intento negarlo, no solo una, muchas. Vivo feliz porque esas cosas ya sucedieron y no las tengo esclavizándome día a día, como muchas otras cosas.

Me gusta la moda y pienso que no porque me guste ir con las tendencias de la moda es algo malo o definitivamente fuera de clase, al contrario, es una forma de sentirme mas ad hoc a mi forma de ser y a la sociedad en la que vivo.

Disfruto de los viajes y me complace presumir que he visitado tantos lugares que probablemente muchas personas nunca van a conocer en su vida. He tomado un poco de cada uno de esos lugares y lo he puesto en mi vida, con el simple afán de guardar esas experiencias conmigo y para siempre.

Me gusta leer. Me gusta escribir. Soy adicta a mi celular porque me da la posibilidad de estar en constante comunicación con la persona que más amo en este mundo y, en general, con las personas que quiero.

Tengo una atracción fatal a la perfección que probablemente al no lograrla me cause una pequeña depresión incontrolable. Nada de cuidado, hasta hoy.

Me conozco y conozco mis cobardías. He superado muchas de ellas en los últimos meses. Me enorgullezco de ellas.

Soy una persona que odia quedar mal con las personas y odia más aún las promesas incumplidas.

Sufro con las personas y me gusta recibir una total atención. Nada más y nada menos.

Consigo, siempre, siempre y siempre, lo que quiero. Si no lo conseguí es porque no lo quería. Por eso siempre he pensado, que debo de tener mucho cuidado con lo que quiero, porque hasta el más mínimo deseo enterrado en lo más profundo, puede hacerme conseguir lo que quiero.

Soy una persona fuerte, poderosa y sin ningún miedo de llegar a ser alguien grande. Pienso tener mucho más dinero del que tengo ahora y una familia grande. Espero conocer el resto del mundo y poder conocer las maravillas de Europa que he logrado admirar un poco hasta ahora.

Soy una persona grande y conozco lo que merezco. No suelo ir por menos.





Anna